Más que catar vino, el enoturismo en Zamora es sentir el alma de un territorio que vive de la vid y de la hospitalidad.
En la Ruta del Vino de Zamora, cada experiencia es una celebración. Los visitantes portugueses pueden participar en catas comentadas, pasear entre viñedos centenarios o vivir la emoción de la vendimia, recogiendo uvas junto a viticultores locales.
Las bodegas abren sus puertas para revelar secretos de producción y ofrecer momentos únicos: desde maridajes de vino con música hasta cenas al aire libre iluminadas por estrellas. Todo está pensado para convertir la visita en un recuerdo inolvidable.
Brinda en Zamora y descubre un enoturismo auténtico, hecho para saborear y sentir.